Gracias Revuelto por Ofrecernos esta ruta a todos los pitufos. Raul, rutas pitufas te desea una pronta recuperacion.
Nuestra ruta empieza en un comentario forero del que nos hacemos eco poniendo la ruta en el calendario pitufo y buscando fecha de forma concertada, tras varios contactos no encontrando la participación deseada hago mía la propuesta, no sin temor, el recuerdo de la ultima ruta tranquila y sus consecuencia pesaba sobre mí con sus abrojos y sus tensiones posteriores, aun así me vi capacitado por conocer el recorrido.
A la kdd nos apuntamos un buen numero de biker, el punto de kdd alejado de la estación y cercano al principio de recorrido, aconsejado por Fray, con algún tropiezo con el tema de la estación con el punto de kdd empezamos la ruta por el parque junto al Guadarrama dirección camino del campillo, con la sierra de fondo cogemos la amable y cómoda pista de “El Campillo” dirección al camping del Escorial encontrando las lagunas del Campillo, casonas y palacios abandonados poblado por aves , ganadería y con un día muy agradable por su temperatura y el terreno impecable todo apuntaba a un día genial.
Llegamos al Escorial, rotonda del Hospital, senderito y bosque para coger un km de ascenso por la pista de Abantos para dejarlo cogiendo un sendero que nos llevaría directamente al centro de la ciudad. Aquí las primeras quejas por la empinada rampa, somos pitufos, pero no tenemos las limitaciones que algunos quieren imponernos por nuestro nombre, yo soy el más perezoso de los pitufos ( kun-fu panda), a trancas y barrancas no sé si me he dejado algún puerto por subir en nuestra comunidad, todo depende de cómo te planteas afrontar el puerto.
En el sendero que nos dejaría en el hospital nuevo despiste que cuesta a parte del grupo un poco de patea-bike para recuperar la senda correcta, por haber reanudado la marcha 100 Km antes no marque un giro sin pensar que hay quien tarda en salir del punto de espera.
Llegamos a las calles del Escorial por las urbanizaciones altas, poco tráfico y llegamos al centro, aquí un punto de ciclo turismo que también tiene encanto a mi gusto.
Un giro Antes del palacio lo peor de la ruta, la caída de Raul, como todas las caídas inesperadas, en un giro, con consecuencias, aquí nos dejo junto a su hermano Tezu y Papa Pitufo, estos se perdieron la foto y el resto de la ruta.
Una caída siempre duele y es triste, la caída de mi amigo y socio Barrancas, de “trancas & Barrancas Cª” me afecto especialmente, siendo hiriente la sola insinuación buscando responsables o culpables en la ruta, yo fui esperando y dejando biker referentes en cada giro, no circulo rápido por ciudad y si algo hubiese podido hacer por evitar un fortuito accidente no lo dudaría, solo puedo desear a Barracas que mejore pronto de su caída.
En el Palacio foto de grupo sin casi descanso bajamos por la Herrería para llegar a la Hermita de la silla, allí algunos nos tomamos la barrita en un entorno privilegiado y otros subieron a la silla, en este momento se produce el segundo momento triste del día, perder a alguien del grupo, nuestras normas nos impiden dejar a nadie atrás, esto es inadmisible y yo admito no mi culpa pero si mi responsabilidad por no delegar en nadie el control del grupo que se divide para subir, al bajar cuando pensamos que todos estamos seguimos el camino.
El desafortunado Curro se lo tomo bien argumentando una rotura y ha admitido mi propuesta personal de enseñarle lo que falta y aun mas, esto no cambia lo pasado pero sirve de consuelo, avisare a todos de la ruta que ya estoy preparando para Curro, en esta me pego a él para asegurarme de que no se pierde.
Senda de los molinos entre ganado y llegada al Escorial para llegar a la entrada de las Cancelas la pista del las Cancelas un paseo amable entre puertas junto a ganaderas entre fincas privadas, para llegar a los Arroyos ya faltos de tiempo por las caídas y la demora en la salida nos han restado la posibilidad de completar el recorrido, solo un principio de estos divertidos senderos para volver por urbanizaciones a la venta del Herreño, junto al río Guadarrama, donde algunos hicieron el honor con la opcional.
Espero que a la mayoría les haya gustado el entorno tanto como a mí, a los que no quedaron satisfechos mis más sinceras disculpas, mi voluntad fue la de agradar, solo pido que no se dude de mi intención.
Destacar que este recorrido transcurre por fincas privadas como tantas y tantas de las que por la sierra transitamos bajo la tolerancia de sus propietarios respetando nuestro derecho al tránsito, hace días mi amigo Javi Martín fue criticado por hacer lo mismo que todos nosotros tantas veces hemos hecho, son cada vez mayores las trabas o limitaciones que tenemos para rodar.
He tardado unos días en ser capaz de relatar esta experiencia, empezó por comentar que este recorrido es para uno de mis paseos habituales de verano, durante el recorrido pasamos casi por la puerta del chalet donde veraneo desde hace mas de 20 años. Me gusta, creo que tiene encanto, es un paseo muy agradable como ruta pitufa, será amor de padre.
Los que antes de la era internet y GPS visitábamos la “tienda verde” en busca de mapas guías y recorridos, sabemos que “las cancelas” son una de las rutas recomendadas en guías de senderismo, etc. aun no comprendo cómo puede dejar que desear o indiferente este recorrido a alguien, las comparaciones siempre…… .
Las rutas por el Escorial empiezan a tener su leyenda, en una ruta por el Escorial empezaron las primeras contrariedades de los “re” lo mismo en la ruta de “los tranquilos” fue el principio de las diferencias, espero que “rutas pitufas tenga salud y fortaleza para superar esta ruta sin secuelas toda una prueba.
La visita a la ciudad Del Escorial para mi es parte de las rutas con encanto, una visita al centro antiguo del Escorial, al Palacio, La Herrería, La silla de Felipe II, hace la ruta aun más bella, a todos nos gustan los senderos, pero no me imagino ningún recorrido de solo senderos, a lo largo de un trazado hay tiempo de todo.
Elegir una ruta como pitufa no es fácil, nuestro planteamiento de nivel y la limitación que supone saber el ritmo del grupo hace que los recorridos se limiten por el riesgo de que se convierta en interminable, hay rutas muy bellas y asequibles que ya se les ha puesto el sello de “no pitufa” cuando lo que hay que hacer es adaptarla. Es solo decisión del quien propone y/o guía decidir cuándo se termina o por donde va el recorrido, aun no puedo entender que alguien quiera completar la ruta sin importar el horario que ha sido comprometido con algunos participantes o cambiar el recorrido pensado, también es derecho no discutible del guía la hora de salida, y donde empezar, es quien lo planifica, las demoras de salida pueden condicionar las rutas desde el principio, los que hemos acudido puntualmente no nos merecemos esto, también hay que ser considerado con el grupo y caso de elevada demora, por qué no ¿pasar directo a las cañitas? ¿Cuál es el límite de espera?
Proponer una ruta no es algo ligero, tiene que tener un previo, un estudio, una planificación, una organización, y una preparación, no se puede pensar en hacer la presentación de una ruta kdd, sin haberlo madurado antes, un trabajo que no se ve para estar lo más seguro posible.
En ruta la colaboración del grupo de forma general es vital, un grupo de amigos no puede darse el lujo de llevar pasajeros, la ruta somos todos y todos tienen que participar, el guía por sí solo no es capaz más que de desarrollar la planificación y marcar el recorrido en espera de ser seguido, en parte es el grupo el que tiene que estar pendiente del guía. Tan importante como el guía es el cierre, referencia de fin de grupo y colaborador que trabaja desde atrás para que el grupo no se demore, es mucho trabajo y necesita toda la colaboración posible.
Siendo varios a cada uno nos gustaría pararnos en diferentes sitios pero creo que ya son suficientes las paradas que se realizan en espera como para hacer aun mas paradas de las necesarias, el ritmo de rodar de cada uno también es diferente, en cualquier grupo incluso el pitufo, los más limitados tiene que esforzarse por seguir el ritmo de los mas rodados y los mas rodados pueden o bien aflojar el ritmo o parar más veces, no he visto del grupo de cabeza nadie quejarse por las largas esperas ni achuchar a nadie, este tema no es nuevo.
Nos juntamos para disfrutar conociendo o rodando diferentes entornos destacados por su encanto, creo que es más importante la reunión que el recorrido, necesitamos confiar en quien nos guía, si no es así ¿se puede ir a rodar?, hay cosas que por ser de sentido común nunca pensé que tendría que comentar.
El guía por un día deja de pensar en sí, y solo piensa en el grupo, pierde su independencia, libertad, tranquilidad, autonomía y comodidad, para preocuparse de presentar su ruta y del grupo, nada pide a cambio, como mucho la esperanza de pensar que otro día será otro pitufo el que nos ofrece su recorrido, que no por ser pitufos dejamos de ser ruteros y seguir disfrutando juntos en rutas guiadas, no tuteladas.
Lo que no puede un guía nunca es dejar de disfrutar, lo que se hace no es por interés ni por obligación ni por compromiso, solo por amistad, hay que exigirle en consecuencia Mirar para atrás, parar lo que sea necesario, vivir la tensión del desarrollo de una ruta, aceptar compromiso, trabas, limitaciones, tensión o presión se convierte en una calentura cuando se es juzgado o cuestionado, una experiencia nada recomendable, en estas condiciones el guía es presa fácil y vulnerable, una ración de algo que te deja mal cuerpo y peor recuerdo.
Tengo una propuesta en la que como en todas he puesto toda mi ilusión, la de un niño grande, Cercedilla Segovia revisando, meditando y calculando todo lo que pueda suceder para evitar imprevistos, con varios bellos paseos previos de exploración me he convencido de que es una gran ruta que no podemos perdernos, una ruta maestra, en esta propuesta que me he trabajado espero disfrutar y llevarme un recuerdo amable que me permita recordar todas la rutas que he propuesto tanto en “los tranquilos” como en “rutas pitufas” para tomar un tiempo o descanso de forma indefinida proponiendo rutas en la esperanza de ver a mis compañeros aportar su experiencia para que rutas pitufas no deje nunca de ser algo muy especial demostrando que el principio de igualdad que tenemos a gala lo es también para participar.
Podría seguir escribiendo un rato mas pero si alguno consigue leer este ladrillo ya tiene bastante y me doy por satisfecho, gracias por leerme y vuestro tiempo.
Supongo que ya a nadie le quedan dudas de por qué me llaman “Pitufo Gruñón”, pero tengo que decir que me siento afortunado por el grupo de personas con las que comparto mi hobby, espero seguir compartiéndolo y disfrutando mucho más tiempo rutas con “Los Pitufos”.
